domingo, 6 de septiembre de 2009

Querida Anónima(o)

¡Hola!

Seré sincera y directa: quiero saber tu nombre.

No tengo la más mínima idea de quién serás y siento curiosidad por quien ha hallado este blog, y ha comentado algo sin atreverse a dejar nomenclatura en referencia. ¿Eres amiga mía? Lamento informarte que ninguna amiga mía escribe completamente bien una palabra en el ámbito cibernético, así que deberás ser más explicativa, porque OHH sí, debes ser mujer.

¿Diabla? En serio, debes decirme quien eres porque debes ser una realmente buena amiga para decirme así. No obstante, me disculparás, pero algo dentro de mí -una corazonada quizás- me dice que no somos amigas. Al menos no que yo me haya enterado.

Lamento romper tu huevito de la ilusión o tu acto de super best friend, caridad o filantropía, pero mi amigo del disfráz no es Armando. Algo ya me decía que me engañaba y te agradesco por probarlo mi querida quien-quiera-que-seas, las pruebas de su infidelidad siempre serán bien recibidas (: Te animaré diciendote que no sufro por él, es más, creo que le soy bastante indiferente al asunto... Lo cual, es verdad, es bien raro. Jajaja.

Aun no entiendo el porqué no poner nombre, me parece -déjame decir- un acto de cobardía. No me molesta que no me lo hayas dicho antes porque, tarde o temprano, ibamos a terminar, recuerda que Nada dura para siempre, menos aún el cariño. Científicamente, esta probado que las homornas que generan el enamoramiento solo duran tres años o menos; así que si hablamos racionalmente, ya estabamos a punto de llegar al finito.

En fin! Espero que te pongas en contacto y satisfagas mi curiosidad identificándote sinceramente -porque claro, siempre puedes mentir- y sabrás, que yo nunca le he dedicado un post enteramente a nadie, así que siéntete agradecida y honrada Jajaja.

Bye-Bye

-Claudia.

No hay comentarios: